Cada amante del béisbol, cree tener una historia increíble, un juego, una jugada, un inning, una situación, un jugador o una victoria en nuestra lista de eventos nunca vistos. El Juego 6 de la Semifinal entre Portuarios y Centrales este miércoles en el estadio Victoria de Girón, me atrevo a decir que se convirtió en un desafío a nuestros recuerdos y experiencias en el béisbol.
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Entonces, ¿por dónde comenzar nuestra retrospectiva diaria de postemporada? En particular, creo que este momento se quedará grabado en mi memoria, porque inevitablemente pensé: bases llenas… Centrales tiene ventaja de siete carreras y… no tenía duda de que Portuarios pelearía su pase a la final, ¿pero podrán remontar este abultado déficit? No, ¡no puede ser posible!
Sin embargo, las perspectivas comenzaron a cambiar peligrosamente. Denis Laza caminó hacia el plato, entró al rectángulo de bateo y, antes de acomodar la arcilla con sus spikes, señaló hacia el dugout de Portuarios que estaba listo para enfocarse en el turno al bate.
Las bases estaban llenas en el inicio del séptimo inning, y Centrales ganaba ampliamente por 8-1. Con una ventaja de siete carreras para buscar nueve outs, era obvio que Centrales se sentía dueño del desafío. A excepción del cuarto episodio, los dirigidos por Armando Ferrer habían anotado carreras en todos los innings. Lo sabemos: no se trata de que parecía una victoria fácil porque, en verdad, lo era, y las posibilidades de visualizar un Juego 7 se asomaban en el horizonte.
Con gran efectividad, el zurdo de los Cocodrilos de Matanzas, Yoanis Yera, se había encargado de limitar a Portuarios durante cinco entradas. Después de un primer inning donde admitió par de hits y una carrera, la velocidad y el comando de los lanzamientos de Yera tomaron su nivel acostumbrado.
Al final, cerró la quinta entrada sacando los tres outs por la vía del ponche. El último oponente de Yera fue Yasniel González, a quien sacó de paso con un changeup en la esquina exterior para pulverizar una amenaza de Portuarios con par de corredores en bases.
Por Centrales, el zurdo Yamichel Pérez había retirado el sexto inning sin contratiempos, pero el equipo de Portuarios, como ocurrió en los Juegos 2 y 5 de esta Semifinal, nunca se dio por vencido. Entonces, llegó la lluvia al estadio Victoria de Girón. Sí, el cambio de clima fue ofensivo, y estuvo provocado por una sola razón: los bateadores de Portuarios desataron una lluvia de conexiones imparables.
Denis Laza, con ese recordado turno para avivar el fuego, clavó un cohete de línea al left field ante un nuevo relevista, el diestro Hermes González, que remolcó las dos primeras carreras del inning épico. Rangel Ramos y Lázaro Martínez, quienes conectaron sendos sencillos ante Yamichel Pérez, anotaron las carreras que redujeron el marcador, 8-3. Alexander Pozo (había sacudido sencillo de rolling al right) se movió hasta la intermedia. Yasniel González hizo tronar su madero, y con un sencillo al center impulsó a Pozo.
Centrales 8, Portuarios 4. Aún la rebelión no había mandado a remover a Yamichel Pérez. El sexto bate de Portuarios, el cátcher Oscar Valdés, subió al plato con Laza en segunda y Yasniel en primera. La manera en que los bateadores estaban destrozando los lanzamientos de Hermes González parecía peligrosa, pero Ferrer le ofreció otra oportunidad.
Probablemente la dirección de Centrales tuvo en perspectiva que la tanda del sexto al noveno bates de Portuarios se habían ido de 15-1 hasta ese momento del desafío. Por supuesto, la decisión fue con la esperanza de que González dominara y, de paso, dar tiempo a que Naykel Yoel Cruz acelerara su calentamiento en el bullpen. Oscar Valdés no pareció cómodo con un par de lanzamientos en la esquina exterior, pero luego ajustó su swing y consiguió un hit de línea al right.
¡Otra vez se llenaban las bases!
Ferrer no esperó más: envió a Naykel al montículo, esperando que el talentoso zurdo frenara el ímpetu de los bateadores de Portuarios. Naykel rápidamente retó a Yasiel Santoya, quien había fallado en sus últimos ocho turnos al bate. Sin embargo, en cuenta de 1-2, Santoya bateó sencillo de rolling al center, acercando a Portuarios a sólo dos carreras de diferencia, 8-6. Ese fue el séptimo hit consecutivo que Portuarios le conectó en el séptimo capítulo a Centrales. Sí, como lo escuchas: ¡Siete de siete! ¡Qué inning!
Eso fue desconcertante. Absurdo: durante la temporada regular, hubo 104 partidos en que un equipo ganador o perdedor bateó al menos siete hits… ¡Y Portuarios los consiguió todos de manera consecutiva sin outs! Para el bullpen de Centrales, el impacto fue devastador. Aún tenían dos carreras de ventaja, 8-6, pero, siendo honestos, necesitaban salir del atolladero en que se convirtió ese séptimo inning.
La terrible noticia para el equipo y la fanaticada de Centrales, fue que Portuarios logró la remontada. Naykel Yoel Cruz terminó su actuación tras golpear con un lanzamiento a Jorge Enrique Alomá, quien amagaba con tocar la pelota. El diestro Randy Cueto subió al box con las bases llenas y ponchó a Roberto Acevedo, pero Rangel Ramos puso el juego 8-7 con su segundo sencillo del inning.
Durante toda la tarde, la defensa de Centrales fue deficiente. Habían cometido tres errores, pero uno solo de ellos les costó carrera, la polémica pifia de Yusniel Ibáñez en el primer inning.*
*Ibáñez intentó controlar el rebote de la conexión de Laza hacia el right-center y, cuando la pelota dio un bounce, su mano izquierda terminó enviándola por encima de las cercas. Al instante el manager de Portuarios, Michael González, señaló que se revisara la jugada. Los árbitros revisaron el video y ordenaron que avanzaran los corredores una base más por la infracción de Ibáñez, y entonces Ferrer fue quien salió a protestar la decisión.
El ataque de ocho hits de Portuarios fue decisivo para soñar con la remontada. Sin embargo, lograron materializarla por otro desliz defensivo de Centrales, esta vez en el momento clave. Aún estaban las bases llenas, y los jugadores del infield tenían la posibilidad de salvar el juego con un double play. Lázaro Martínez conectó un rodado que amenazaba con seguir de viaje al center. Rápidamente, el intermedista Yadil Mujica hizo gala de su desplazamiento, capturó el bounce, pisó segunda, pero realizó un disparo deficiente a la inicial. ¡Portuarios completó la remontada, anotando dos carreras!
Sobre la jugada, hubo dos puntos claves: Mujica realizó un pivoteo con pocas posibilidades de sacar out en la inicial a un corredor rápido como el leadoff de Portuarios, Lázaro Martínez. Pero, al mismo tiempo, Ariel Martínez, quien realmente no cuenta con una gran experiencia jugando la inicial, tampoco pudo bloquear la pelota. El tiro le pasó por debajo de las piernas, y esa avería también ayudó a que Yoasán Guillén anotara desde segunda.
Los jugadores de Portuarios no podían controlar la emoción. Después de abrir la séptima entrada con desventaja de siete carreras, remontaron para llevarse el éxito por 9-8. En un rally épico de ocho anotaciones con siete hits consecutivos prácticamente dictó sentencia. En la única oportunidad de empatar el juego, Yusniel Ibáñez fue enviado al plato, y lo sentenciaron con un doble tiro: de Denis Laza a Lázaro Martínez al cátcher Oscar Valdés.
A diferencia del Juego 5, Michael González le ofreció toda la confianza al relevista Andy Vargas, quien sacó los últimos nueve outs. Y, aunque parecía increíble: ¡Portuarios remontó y discutirá la final de la I Liga Élite del Béisbol Cubano!