Adolis García: Capítulo XIII
Adolis García mantuvo el enfoque de la noche anterior: Dejó llegar los lanzamientos, mientras tomaba el tiempo suficiente para identificar el giro de la pelota hasta llegar al plato. Los resultados contra el zurdo Framber Valdez, fueron par de imparables en tres turnos durante la noche del sábado: Sencillo y jonrón, ambos hacia su lado opuesto del campo, por el rightfield del Globe Life Field. Aunque suena extraño, a veces los pequeños ajustes comienzan a dar grandes frutos, y eso es lo que ha estado necesitando Adolis García desde que golpeó un doble en su primera visita a la caja de bateo como outfielder del All-Star Game. Desde entonces, el OPS de .981 que registró en mayo se desapareció, con una caída a .716 en junio, .660 en julio y .690 antes de enfrentarse este domingo a los lanzadores de los Astros de Houston. Obviamente, parte de esa regresión que ha sufrido Adolis era tan predecible como razonable por varias razones: (A) Se encaminaba a enfrentar por vez primera el desafiante rigor de alinear todos los días en MLB. (B) Su experiencia se resumía a menos de los pitcheos que vio en el primer mes calendario tras su debut. (C) El breakout que protagonizó durante la primera mitad de temporada despertó demasiada atención dentro de la liga, tras golpear 22 jonrones y producir 62 RBIs en apenas 79 juegos desde que fue subido a MLB el 14 de abril pasado. Incluso sin profundizar en ese rendimiento, 22 HR & 62 RBIs para una primera mitad de campaña suena fabuloso, pero el éxito que estaba protagonizando “El Bombi” impactó más allá de esos números: Decidió juegos, encabezó electrizantes Walk-Offs, atrapadas de leyenda y disparos que arrancaron corredores de las bases. En un equipo que aún sufre un extensivo proceso de reconstrucción, Adolis García y Joey Gallo se convertían en la ineludible razón para sintonizar cada juego de los Rangers. Con la partida de Gallo a los Yankees antes de la fecha límite de cambios, Adolis se robó el show cada día, pero sus números no han podido resurgir. Aun así, el outfielder avileño lidera las principales métricas de poder en la disminuida ofensiva de los Rangers, y probablemente rompa los récords de jonrones y remolcadas para novatos en la historia de la franquicia. Sin embargo, a pesar de que su temporada de 2021 ya se inscribió entre las más espectaculares para novatos de los Rangers, Adolis García aún persiste en ganar el premio a nivel de liga. La batalla no será nada fácil teniendo como contendientes a su compatriota Randy Arozarena de los Rays y al diestro de los Astros de Houston, Luis García, pero aún quedan 32 partidos por delante. Y en ese lapso, “El Bombi” espera resurgir, aunque deberá lograr los ajustes que no ha podido extender durante sus últimos dos meses. Sí, quizás ese momento está llegando. En sus últimos cinco partidos, Adolis ha rociado ocho inatrapables en 20 turnos, con tres juegos de multi-hits: Esa es la misma cantidad que acumulaba en sus 14 desafíos anteriores. Y, aunque Adolis sumó este domingo su 15to juego consecutivo ponchándose, fue interesante ver cómo el impacto de su swing nos recordó aquellos momentos de emoción durante abril y mayo pasado. Tras cinco visitas al plato, “El Bombi” lució intratable, produciendo de 4-3 con sencillo remolcador, doble y un Grand Slam que fulminó completamente a los Astros: Ese jonrón número 29 reafirmó a Adolis como líder entre los bateadores cubanos, un inning después de que su compatriota Yordan Álvarez lo empatara con un bombazo de 377-ft en el inicio del quinto. Entre la emoción del cuarto de sus últimos cinco hits hacia el right-center , Adolis no renunció a atacar la slider de 92 mph de Bryan Abreu, pero hubo un punto que deberíamos analizar: No se balanceó buscando halar. ¡Y eso volvió a ser muy importante en su proceso de ajustes! “He estado trabajando en golpear la pelota en mi zona y concentrándome en asegurarme de no perder mi lanzamiento” , le dijo a MLB el jardinero cubano a través de un traductor. “Eso es básicamente lo que he intentado hacer últimamente, y parece estar funcionando”. Adolis esperó la slider de Abreu, probablemente porque los lanzadores derechos lo están retando más con el cambio de velocidad (11%)—a diferencia del 4% antes del All-Star Game—cuando han estado por debajo en la cuenta durante esta segunda mitad de temporada. Esa tendencia también podríamos tomarla como respuesta para analizar el éxito de Adolis cuando golpea hacia su lado opuesto, aunque este año ha sido indetenible por el pitcheo de los Astros. En 14 juegos este año, Adolis ha sido el rival más productivo de las Grandes Ligas contra Houston, registrando seis jonrones—empató con Kyle Seager—y 15 RBIs. Pero más allá de esa explosión, mientras busca sus ajustes, la tendencia más significativa para el outfielder avileño fue la sacudida de su madero. Durante apenas cuatro cinco visitas al plato, “El Bombi” rubricó su primer partido con tres anotadas este año, el noveno donde registra al menos par de extra bases y su 17mo de multi-remolcadas. ¿Qué significan esas señales? Fue sólo el segundo partido de Adolis con múltiples remolcadas en esta segunda mitad de la temporada. No sé si prefieres mantener las esperanzas o ver para creer, pero la realidad es que sólo Adolis García podrá demostrar si este resurgimiento a finales de agosto será el comienzo de su ascenso durante los últimos 32 juegos de los Rangers. (Foto: Adolis García/GettyImages)
—Encontrando los ajustes—