MLB 2025 - Serie Mundial | Con histórica remontada, los Dodgers repiten como campeones tras vencer a Blue Jays 5-4 en 11 entradas en el Juego 7
- Ray Otero-Alonso
- 2 nov
- 8 Min. de lectura
Actualizado: 3 nov
Serie Mundial 2025
Los Dodgers ganaron la serie 4-3
El final de temporada fue realmente histórico. Los Ángeles Dodgers lograron una remontada memorable para derrotar a los Toronto Blue Jays por 5-4 en 11 entradas, en el decisivo Juego 7 de la Serie Mundial 2025, que se extendió por cuatro horas y siete minutos. Así, en la primera hora de este domingo 2 de noviembre, los Dodgers se convirtieron en el primer equipo en ganar campeonatos consecutivos de Grandes Ligas en 25 años.
La victoria, por demás, dejó a Toronto con una año más de espera, tras pasar 32 años para nuevamente arribar a una Serie Mundial y tras colocarse apenas a dos outs de acabar la sequía de títulos del elenco canadiense.
Y los Dodgers, nuevamente contra la pared en el noveno episodio cayendo por una carrera, vieron como el menos esperado de sus jugadores, el veterano infielder venezolano de 36 años, Miguel Rojas, golpeaba un cuadrangular ante el cerrador Jeff Hoffman, para producir una sensacional igualada que terminó mandando el juego a extra innings y cayó como un cubo de agua fría a todo un estadio que parecía listo para la coronación de su elenco.
Hoffman, quien venía con una labor casi impecable en sus cuatro entradas de trabajo en la Serie Mundial, permitió lo que nadie podía creer sobre todo considerando que Rojas era la menor amenaza ofensiva de los Dodgers. El derecho terminaría visiblemente disgustado tras el choque, al expresar a la cadena de televisión canadiense TSN: "Le costé un anillo de Serie Mundial a todos en el elenco".
Solo dos entradas más tarde, los Dodgers anotaron la carrera que se convertiría en la del triunfo. En la undécima entrada, Will Smith bateó otro jonrón solitario, esta vez contra Shane Bieber, asegurando una ventaja que se mantuvo y apagó las esperanzas de Toronto y sus seguidores.
"Estaba emocionado. Sabía que necesitábamos anotar una carrera y poder hacerlo en ese momento crucial fue enorme", dijo Smith, y terminó diciendo "Sueñas con esos momentos. entradas extras, poner a tu equipo por delante, lo recordaré para siempre".
Sin embargo, fue un Juego 7 lleno de momentos que podrían haber cambiado el rumbo a favor de cualquier equipo. Después del cuadrangular de Smith en el undécimo inning, los Blue Jays, que aspiraban a su primer título de la Serie Mundial desde 1993, tuvieron una gran oportunidad en la parte baja del inning con corredores en primera y tercera base y solo un out, en una entrada que comenzó con un doble al izquierdo de Vladimir Guerrero Jr. No obstante, Alejandro Kirk conectó un rodado al campo corto que Mookie Betts aprovechó para completar una doble jugada, poniendo fin al partido.
"Dolerá durante unos días, unas semanas, cuando estás tan cerca. La parte positiva de mí tardará un tiempo en asimilarlo", dijo el director de los Blue Jays, John Schneider."Pero creo que ahora mismo simplemente tienes que, no sé, asimilar lo que pasó".
Una de las grandes notas de este Juego 7 fue sin duda el derecho japonés Yoshinobu Yamamoto, quien se convirtió en el ganador del choque. Primero lanzó un juego completo en el Juego 2 de la serie, luego completó seis entradas permitiendo una carrera en el Juego 6 y este sábado en el Juego 7 y con apenas descanso tras realizar 96 lanzamientos el viernes, lanzó 2 2/3 innings sin permitir carreras para obtener su tercer triunfo en esta Serie Mundial y el quinto en toda la postemporada 2025.
Gracias a su desempeño, Yamamoto fue merecidamente nombrado el Jugador Más Valioso de la Serie Mundial, siendo la primera vez que un lanzador japonés recibe este título desde la creación del galardón en 1955, y solo la segunda que un jugador de Japón lo alcanza desde el logrado por el bateador designado Hideki Matsui en 2009 con los Yankees.
La participación japonesa en el equipo de los Dodgers fue indudablemente crucial durante todo el año, especialmente por el desempeño Shohei Ohtani durante la etapa regular y postemporada, el propio Yamamoto como abridor en ambas etapas y Roki Sasaki, incorporado en los finales pero con estelar rol de cerrador en toda la postemporada. La repercusión en Japón fue notable, con los periódicos de la isla destacando en sus titulares el título del equipo y la contribución esencial de los jugadores japoneses.
Parecía que los Toronto Blue Jays iban a cerrar con broche de oro su espectacular temporada 2025, cuando pusieron contra las cuerdas a los Dodgers con una victoria en el Juego 5, haciendo que la serie regresara a Toronto sin margen de error para los visitantes. Fue un momento clave para descubrir de qué estaban hechos estos Dodgers, quienes por primera vez en esta postemporada enfrentaron la eliminación en días consecutivos. La respuesta fue contundente; como un equipo que sabe ganar en estas instancias y aun jugando ofensivamente a media máquina, los Dodgers ganaron dos partidos consecutivos como visitantes, consolidando así una dinastía con su tercer título de Serie Mundial en seis años.
"Hacer lo que hemos hecho en este período de tiempo es bastante notable", dijo el manager de los Dodgers, Dave Roberts. "Supongo que dejaremos que los expertos y todos los aficionados hablen sobre si es una dinastía o no, pero estoy bastante contento con nuestra situación".
Sin duda, la victoria alteró los planes de celebración en Canadá. Esta Serie Mundial había capturado la atención incluso de los aficionados ocasionales del deporte al norte de la frontera estadounidense, en medio de la persistente tensión política entre Canadá y Estados Unidos y el deterioro de las relaciones bilaterales debido al impacto económico de los aranceles impuestos por el actual presidente estadounidense.
Este Juego 7 parecía inclinarse a favor de Toronto, cuando con Shohei Ohtani en el montículo por los Dodgers, Bo Bichette puso a los Blue Jays en el marcador en la tercera entrada con un jonrón de tres carreras que tenía un gran peso en este momento del partido.
Ohtani, iniciando el juego más por el reglamento de la MLB debido a su condición de lanzador-bateador que por su turno en la rotación tras solo tres días de descanso, no mostró el rendimiento esperado desde el primer inning. Enfrentó dificultades en las dos primeras entradas, completando ambos innings con 45 lanzamientos, de los cuales solo 17 fueron strikes. En el segundo inning, con bases llenas y dos outs, logró salir de la amenaza ponchando a Andrés Giménez. Parecía que este sería su último inning en el juego, y que el supuesto abridor del Juego 7, el derecho Tyler Glasnow, entraría en el tercero. Sin embargo, Ohtani continuó en el juego y, tras un sencillo de George Springer al inicio del tercer episodio, un sacrificio de Lukes, un wild pitch y un boleto intencional a Guerrero, todo quedó listo para el cuadrangular de Bichette que sacó al japonés del partido.
Los Dodgers respondieron ante el veterano Max Scherzer apenas un inning después. Smith inició la entrada con doble al izquierdo, mientras Freddie Freeman dejó corredores es las esquinas con sólido lineazo al derecho. Tras el out sobre Betts y el boleto a Max Muncy, Teoscar Hernández puso a los Dodgers en la pizarra, con elevado en línea de sacrificio al central, una jugada que tuvo a Daulton Varsho impecable y que evitó más daño para los dueños de casa.
Los ánimos se caldearon en la parte baja de la propia cuarta entrada, cuando el campocorto de los Blue Jays, Andrés Giménez, tras casi ser golpeado con un lanzamiento adentro por el relevista zurdo Justin Wrobleski - un pitcheo sobre el cual en la repetición se vio a Giménez tratar de tomar el pelotazo acercando su mano al lanzamiento -, al siguiente pitcheo Wrobleski lo golpeó en la mano, claramente no de manera intencional, pero Giménez respondió negativamente y ambos jugadores intercambiaron palabras que provocaron las bancas se vaciaran, hasta la intervención de los árbitros quienes terminaron la trifulca emitiendo una advertencia a ambos elencos.
En el sexto inning los Dodgers recortaron la diferencia a solo una carrera, cuando boleto a Betts, sencillo de Muncy y rodado de Teoscar dejaron corredores en las esquinas, solo para que Tommy Edman elevara de sacrificio al centro para el 3-2 en el marcador. Sin embargo, los Blue Jays restablecieron su ventaja de dos carreras en la parte baja de la entrada, cuando el encendido Ernie Clement - en el juego igualó la marca de total hits en postemporadas (29) en poder del cubano Randy Arozarena y no se quedó en solitario con la misma, cuando otro cubano, Andy Pagés, lo evitó más tarde en el juego - golpeó sencillo al izquierdo y tras robar segunda, anotó por doble de Giménez al derecho.
Una carrera que no recibe mucha atención en el juego llegó para los Dodgers en el octavo inning, cuando la dirección de Toronto envió al derecho Trey Yesavage al montículo, y este permitió un jonrón solitario de Muncy al jardín derecho, acercando nuevamente a su equipo a una carrera y dejando el escenario preparado para el cuadrangular de Rojas que empató el marcador en el noveno.
Los últimos innings del juego fueron intensos y emocionantes. Los Blue Jays estuvieron a punto de desatar la celebración en todo Canadá cuando, en el noveno inning, llenaron las bases con solo un out. Sin embargo, los Dodgers, con el cuadro cerrado para evitar la posible anotación decisiva de Isiah Kiner-Falefa en tercera base, primero presenciaron una brillante jugada defensiva de Rojas en segunda base. Rojas fildeó un fuerte rodado de Daulton Varsho y, con un tiro perfecto, puso out a Falefa en home plate. Esta jugada precedió a un batazo de Clement al jardín izquierdo que tenía al jardinero Kiké Hernández montado y parecía que decidiría el juego, pero Andy Pagés, recién ingresado al juego, recorrió casi 40 metros en una carrera que lo llevó a chocar con Kiké en el izquierdo, finalmente realizando una formidable atrapada para el tercer out de la entrada, salvando a los Dodgers del desastre y forzando los extra innings.
Sobre la jugada, Kiké dijo a la cadena ESPN después del juego: "Iba a hacer una jugada al estilo Willie Mays, y entonces [Pagés] me tacleó y sentí como si me hubieran humillado, y pensé que habíamos perdido", adicionando, "estaba desanimado porque pensé que habíamos perdido. Y él se me acercó y me dijo: '¿Estás bien?' '¡Al diablo con eso, ¿tienes la pelota?!', le dije y él me dijo: 'Sí'. Y yo le dije: '¡Sí, vamos!'". Kiké también admitió: "Cuando la Serie Mundial está en juego, estaba dispuesto a que me golpearan en la cara".
Ambos jugadores tuvieron la oportunidad de adelantar a su equipo en el décimo inning, cuando los Dodgers también llenaron las bases, pero no lograron anotar ante el relevista derecho Seranthony Domínguez. Primero, Pagés fue el segundo out al batear un rodado al campo corto que forzó a Betts en el plato, y luego Kiké conectó un rodado hacia la inicial que terminó en un out milimétrico gracias a la excelente cobertura de Domínguez en la base.
Este año fue la primera ocasión en la historia de la MLB en que una temporada comenzó y concluyó fuera de Estados Unidos. Los Dodgers iniciaron la temporada el 18 de marzo en el Tokyo Dome de Tokio, Japón, comenzando su defensa del título con una victoria de 4-1 sobre los Chicago Cubs. Casi ocho meses después, los Dodgers finalizaron con una victoria de 5-4 en el Rogers Centre de Toronto, Canadá, asegurando su segundo título consecutivo y el noveno en la historia del equipo. Desde su fundación oficial en 1883 en Brooklyn, antes de unirse a la Liga Nacional en 1890 como los Brooklyn Bridgegrooms y finalmente como Brooklyn Dodgers en 1932, los Dodgers lograron su primer título en 1955 en una histórica Serie Mundial de siete juegos contra los New York Yankees, y luego su segundo en 1959, pero el primero como Los Ángeles Dodgers tras su traslado al oeste del país al finalizar la temporada de 1957.
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